La presente investigación tiene el objetivo: describir y analizar el rendimiento académico de los estudiantes de pre grado de una universidad pública del Perú, durante los años del 2016 al 2019, mediante las calificaciones obtenidas al término de cada semestre, corresponde a un estudio cuantitativo, descriptivo y analístico. Se procesaron estadísticamente las notas obtenidas por los todos los estudiantes; cuyos resultados muestran que el rendimiento de los estudiantes es satisfactorio en un 70%, que depende de la escuela profesional y de las asignaturas. Se concluye que los estudiantes de las especialidades de ingeniería y de ciencias básicas tienen, en términos generales, menores rendimientos que los de ciencias sociales y ciencias de la salud; las asignaturas con menores rendimientos son: química, física y matemáticas.

Palabras clave: Rendimiento académico, educación superior, universidad pública, calificación.

Abstract

This research has the objective: to describe and analyze the academic performance of undergraduate students of a public university in Peru, during the years 2016 to 2019, through the grades obtained at the end of each semester, corresponds to a quantitative study, descriptive and analytical. The grades obtained by all the students were statistically processed; whose results show that the performance of the students is satisfactory in 70%, which depends on the professional school and the subjects. It is concluded that the students of the specialties of engineering and basic sciences have, in general terms, lower performance than those of social sciences and health sciences; the subjects with the lowest performance are: chemistry, physics and mathematics.

Keywords: Academic performance, higher education, public university, qualification.

Resumo

Esta pesquisa tem como objetivo: descrever e analisar o desempenho acadêmico de estudantes de graduação de uma universidade pública no Peru, durante os anos de 2016 a 2019, por meio das notas obtidas no final de cada semestre, corresponde a um estudo quantitativo, descritivo e analítico. As notas obtidas por todos os alunos foram processadas estatisticamente; cujos resultados mostram que o desempenho dos alunos é satisfatório em 70%, o que depende da escola profissional e das disciplinas. Conclui-se que os alunos das especialidades de engenharia e ciências básicas apresentam, em termos gerais, desempenho inferior aos das ciências sociais e ciências da saúde; as disciplinas com menor desempenho são: química, física e matemática.

Palavras-chave: Desempenho acadêmico, ensino superior, universidade pública, qualificação.

Introducción

Se buscó, se busca y se buscará siempre el equilibrio, para poner fin el hambre, la pobreza, para lograr la seguridad alimentaria, obtener la mejora en la nutrición humana; promover la vida sana y el bienestar, la educación inclusiva y equitativa, las oportunidades de aprendizaje para todos, el crecimiento y desarrollo económico, sin discriminación alguna (Organización de las Naciones Unidas, 2018).

Aunque los espacios y los tiempos no corresponden a la presente investigación, el rendimiento académico ha sido determinado por la naturaleza y las condiciones del aula invertida (Hinojo et al., 2019). El rendimiento académico tiene relación con el uso de las tecnología; es decir, el primero depende del segundo; la tecnología ayuda y favorece el rendimiento académico (García-Martín y Cantón-Mayo, 2019).

De acuerdo con Suardiaz-Muro et al. (2020), los estudiantes de la universidad quedan expuestos a ciertos “problemas de regularidad, cantidad y calidad de sueño”, los cuales generan influjos sobre el rendimiento académico. En este sentido, se requieren estudios experimentales, también clínicos y epidemiológicos.

En realidad no queda al margen del rendimiento académico el contexto familiar; la familia es determinante en la formación de las personas; es decir, tienen presencia significativa los dos padres, los hermanos, los tíos y los demás familiares; todo el círculos familiar; este contexto constituye los denominados factores sociofamiliares (Rodríguez & Guzmán, 2019; Martínez Chairez et al., 2020).

En el Perú, el sistema universitario tiene sus características, su propia naturaleza, su propia organización, su finalidad y sus funciones, según la ley universitaria 30220. Mediante la misma se ha generado un social y económico (Rosas, 2017); se describe la naturaleza y las condiciones laborales, las condiciones de trabajo y la estabilidad laboral de los docentes (Ulloa Gamarra, 2018), el cumplimiento de las condiciones básicas de la calidad (Ríos et al., 2021).

El rendimiento académico está relacionado con la motivación, la formación profesional, mediante el enfoque por competencias; significa el desarrollo de capacidades, conocimientos y actitudes; los cuales revelan los desempeños para la solución de los problemas de contexto personal y social, aspectos relacionados con el desarrollo del conocimiento científico y tecnológico; en este sentido, todo aprendizaje logrado por el estudiante es la interacción del proceso desplegado por el docente, el estudiante y el diseño curricular (Quiroz Pacheco y Franco García, 2019; Pérez del Pino y Franco-Mariscal, 2020). Responde a una evaluación formativa (Molina-Soria et al., 2020).

El rendimiento: producto final de un periodo lectivo (semestre) queda medido mediante una nota cuantitativa, con un rango aprobatorio de 11 a 20, desaprobación 7 a 10, y reprobación menor de 7; cuya nota promociona de un semestre a otro, se asumen con perspectivas diferentes, con responsabilidades de los actores del proceso de enseñanza y aprendizaje. Esta calificación lograda por el estudiante, al culminar una asignatura o el conjunto en el semestre académico, sea apreciada o no, expresa un conjunto de normas, saberes, valores precisados como tales en la universidad pública.

Desde la perspectiva cuantitativa, este rendimiento es simbólico, logrado por el estudiante, después de haber interiorizado las enseñanzas del docente, realizando un conjunto de diversas actividades, los procesos de exámenes durante el periodo y las diversas actividades académicas; las notas se promedian y explicitan en una nota final, registrada en un centro de cómputo, para la información de los usuarios; la responsabilidad únicamente es asumida por quien aprende y por quien tiene la responsabilidad de calificarla, como forma de verificación de si los contenidos previstos fueron asimilados y acumulados, con los cuales pueda resolver determinados procesos formulados mediante los instrumentos de evaluación. El término "rendimiento" tiene muchas implicaciones, principalmente si se considera las calificaciones a los alumnos: el referente casi exclusivo. Esta información genera, incluso, una lectura ingenua que enfoca solamente la responsabilidad académica del estudiante (Porcel et al., 2010).

Entonces surge la explicación y perspicacia de rendimiento académico: un universo totalmente complejo (Vásquez Villanueva et al., 2020), conlleva la necesidad explicitar los abordajes cuantitativo y cualitativo, en el medio académico universitario, tomando en cuenta la población motivo de estudio, que conduzcan a explicaciones de las verdades objetivas, durante el proceso de formación profesional, asumiendo un enfoque de competencias, que al ser logradas son desempeños, durante el proceso de formación y culminar con el ejercicio de la profesión. La investigación se enmarca en el objetivo de determinar el porcentaje de alumnos aprobados y desaprobados, en las asignaturas y escuelas profesionales, según los datos de la población.

Factores relacionados al rendimiento académico en la universidad pública

Los aprendizajes del estudiante, expresados en notas, implican una serie de variables personales; por ejemplo, variables sociales, con incidencia directa e interviniente, constituyen dimensiones de esta variable: los factores familiares, económicos, académicas e institucionales; es necesario observarlas en el contexto y el tiempo del proceso de cambios de normas legales y, consecuentemente, la necesidad de no descuidadas, más bien interpretarlas, según la significación de sus alcances, las limitaciones y las oportunidades, las cuales intervienen y condicionan los procesos de aprendizaje y los resultados respectivos.

El clima intelectual de la familia es un predictor significativo de la aproximación al aprendizaje. Las familias que promueven la discusión y el interés en la cultura, y motivan a sus hijos a comprometerse en el trabajo escolar, maximizan el significado y comprensión de las actividades escolares (Chaparro et al., 2016)

La dimensión académica, por las condiciones que la universidad, refiere el plan de estudios, los procesos de interacción, el sistema de evaluación; en los cuales el estudiante debe hallar lo que busca, lo que puede demostrar con sus habilidades y destrezas logradas, y en el marco del conocimiento el descubrimiento de lo verdadero y falso, lo valido y objetivo; las oportunidades de tutorías ofrecidas; las orientaciones vocacionales y de esclarecimiento de los espacios de desenvolvimiento profesional: factores predictores de su rendimiento académico (Quiñones-Negrete et al., 2021).

Estos factores se agregan a los hábitos de estudio, el tiempo disponible para el estudio, el uso y distribución del tiempo libre y de ocio, el periodo de asistencia a sesiones presenciales, la actitud y el vínculo que logra establecer, las asignaturas; esto generara la posibilidad de poner en marcha la curiosidad, generar espíritu crítico para dudar, enfrentar y afrontar la búsqueda de explicaciones convincentes y basadas en evidencias y la actitud investigativa, con la expectativa, las curiosidades y necesidad de asumir con pasión el estudio; todo esto afecta el nivel de rendimiento académico (García García, 2019; Cedeño-Meza et al., 2020; Soto & Rocha, 2020).

Al conjunto de factores, se suman: la edad de ingreso de los estudiantes, su identidad con la profesión, y las aptitudes y los intereses; a veces, cuanto más jóvenes son, son poco reflexivos, por ende, menos responsables de su rendimiento, transfiriendo la responsabilidad a sus profesores, al sistema de enseñanza, al tipo de universidad; dejan al margen el orden, el rigor y el esfuerzo que exige la actividad académica.

los estudiantes con bajo rendimiento académico operan con un concepto negativo de sí, y asumen que no son “inteligentes”, que nunca pueden salir bien, que sus compañeros son “mejores” que ellos y se da la profecía autocumplida: “para qué estudiar tanto si al final yo soy de tres”. Ello deriva en un círculo vicioso donde obtiene lo que cree que se merece –una mala nota-, que a su vez es lo único por lo cual trabajó. Todo ello redunda en expectativas de éxito muy bajas (García et al., 2014, p. 275).

La disponibilidad económica genera cierta autonomía y solvencia para asumir los gastos de vivienda, transporte, servicios básicos, recreación, vestuario, vivienda propia, mucho más en el caso de foráneos, quienes tienen que solventar los gastos, personalmente, con autonomía propia o con el apoyo de algunos familiares, también postular a las becas de vivienda y alimentación que brinda la universidad (Espejel García & Jiménez García, 2019).

Desde hace décadas, los estudios confirman que los estudiantes criados en familias con desventajas socioeconómicas tienen un mayor riesgo de tener bajo rendimiento académico, menores tasas de finalización en la educación secundaria y menor desarrollo cognitivo; se describen tres de los motivos, por los que la necesidades sociales y económicas afectan directamente el rendimiento académico: en primer lugar, estos estudiantes tienen un menor acceso a apoyos académicos y sociales fuera de la escuela (clases de refuerzo educativo, oportunidades de enriquecimiento académico, campamentos de verano, etc.); en segundo lugar, a menudo están expuestos a condiciones que influyen en su salud, seguridad y bienestar (acceso limitado a atención médica, mala alimentación, condiciones de vivienda desfavorables, barrios marginales, etc.); y en tercer lugar, los padres de estos estudiantes, por lo general, no tienen acceso a altos niveles de capital social y cultural, por causa de la exposición constante a condiciones adversas: servicios locales, redes sociales comunitarias, etc. (Rodríguez & Guzmán, 2019).

Finalmente se agrega la dimensión personal, que refiere los factores psicológicos, físicos y biológicos; con estos factores, los estudiantes enfrenta la experiencia del aprendizaje: único e irrepetible: estos factores condicionan la atención y la concentración, posibilitan o no la escucha activa, el pensar y razonar sobre el objeto de estudio; disponiendo las aptitudes para la búsqueda y logro del saber cómo proceso de interiorización; esto le permite: asumir con proactividad o ansiedad, motivación intrínseca, el deseo de logro y crecimiento permanente, y responder a las expectativas familiares, en las actividades académicas y los exámenes; cuyo conjunto expresa el rendimiento académico.

Las calificaciones y el rendimiento académico

En el sistema universitario peruano, la nota obtenida por los estudiantes está expresada en una escala vigesimal, con valores numéricos que van desde el cero hasta el veinte. La nota mínima aprobatoria la define cada universidad; hay universidades en las cuales la nota mínima aprobatoria es once, mientras que en otras es trece y en algunas catorce.

Esta escala vigesimal también era utilizada para calificar a los estudiantes del nivel secundario hasta el año 2018; sin embargo, desde el año 2019, los estudiantes de primero de secundaria debían ser calificados con una escala que ya era utilizada en niveles de inicial y primaria: AD, A, B y C (Ministerio de Educación [MINEDU], 2019), esta escala de calificaciones por competencias, establecidos por el MINEDU, se define en la tabla 1.

Tabla 1.

Escala Cualitativa Establecida por el Ministerio de Educación del Perú

Escala	Significado
AD	Logro destacado
	Cuando el estudiante evidencia un nivel superior a lo esperado respecto a la competencia. Esto quiere decir que demuestra aprendizajes que van más allá del nivel esperado.
A	Logro esperado
	Cuando el estudiante evidencia el nivel esperado respecto a la competencia, demostrando manejo satisfactorio en todas las tareas propuestas y en el tiempo programado.
B	En proceso
	Cuando el estudiante está próximo o cerca al nivel esperado respecto a la competencia, para lo cual requiere acompañamiento durante un tiempo razonable para lograrlo.
C	En inicio
	Cuando el estudiante muestra un progreso mínimo en una competencia de acuerdo al nivel esperado. Evidencia con frecuencia dificultades en el desarrollo de las tareas, por lo que necesita mayor tiempo de acompañamiento e intervención del docente.
Fuente: Ministerio de Educación del Perú.

La ley universitaria peruana 30220 determina las exigencias de calidad universitaria (Ríos et al., 2021). En la UNSAAC, el número de ingresantes constituye el principal factor de crecimiento de la población estudiantil, el cual tiene incidencia en el tamaño de la oferta de la formación profesional.

Las notas, obtenidas por un estudiante al finalizar un semestre académico, están expresadas en una escala numérica vigesimal y permiten determinar el rendimiento académico, que se expresa mediante las calificaciones aprobatorias o desaprobatorias de un estudiante en una determinada asignatura o curso.

Metodología

La investigación es de enfoque cuantitativo, es de diagnóstico, descriptiva, analítica, de acuerdo con Hernández et al. (2014). La población del estudio estuvo conformada por todos los estudiantes de pregrado matriculados en la UNSAAC entre los semestres 2009-1 y 2019-1, ambos incluidos. Se recurrió a una fuente de datos primaria, constituida por la base de datos de las calificaciones obtenidas por los estudiantes, quienes conforman la población del estudio. De la base de datos de la universidad se extrajo un archivo que contenía los datos relevantes, para la presente investigación, tomándose las medidas necesarias para cumplir con ley de preservación de datos personales, cuyos datos fueron medidos mediante una rúbrica de evaluación, con los valores tipo Likert, con las denominaciones: logro destacado (AD), logro esperado (A), en proceso (B) y en inicio (C).

El archivo obtenido contenía la información de las notas finales de los estudiantes y estuvo constituido por los siguientes campos: código de estudiante, escuela profesional asignatura, nota obtenida (un entero entre -1 y 20, donde -1 se usaba para indicar que el estudiante no se presentó a las evaluaciones), y el departamento académico encargado de brindar el servicio de enseñanza. Dado el gran tamaño del archivo (más de dos millones de registros) fue preciso usar un gestor de base de datos (Microsoft Access) para procesar la información y generar tablas que luego se migraron a una hoja electrónica (Microsoft Excel) y al software estadístico Minitab.

Se consideró conveniente expresar la nota vigesimal, en una escala ordinal, similar al usado por MINEDU. La variable resultante es “Rendimiento Académico” y adopta los siguientes valores: insatisfactorio, en proceso, satisfactorio y destacado. Esta clasificación tiene la ventaja de permitir expresar el rendimiento académico en forma gráfica. La relación entre las variables Rendimiento Académico y Nota se muestra en la tabla 2.

Tabla 2

Categorías de Rendimiento Académico

Rendimiento Académico
Rendimiento Académico	Rango de notas
Insatisfactorio	10 o menor
En proceso	11 a 13
Satisfactorio	14 a 17
Destacado	18 a 20

Desde el semestre 2016-1, la mínima nota aprobatoria en la universidad es catorce; en consecuencia, las notas aprobatorias corresponden niveles de satisfactorio y destacado.

Resultados y Discusión

Las notas finales obtenidas por los estudiantes de la UNSAAC, en todas las asignaturas que se dictaron entre los semestres académicos del 2016-1 al 2019-1, ambos incluidos, se expresan en forma de un histograma en la figura 1. Se observa que los datos siguen una distribución asimétrica; mientras la nota 13 se presenta con una frecuencia del 3,9%, la nota 14 tiene una frecuencia del 24,5%, la más alta de todas. El 75% de las notas son mayor o igual a 14, lo que representa que el 75% de las notas son aprobatorias.

Figura 1

Histograma de las Notas obtenidas por Estudiantes de la UNSAAC. Semestres 2016-1 al 2019-1

La evolución de las notas promedio obtenidas por los estudiantes desde el semestre 2009-1 al 2019-1 se muestra en la figura 2. Entre los semestres comprendidos entre el 2009-1 y el 2015-2 la mediana de las notas en toda la UNSAAC fue de doce; mientras que en los semestres correspondientes al año 2016, la mediana subió a catorce y a partir del año 2017 a quince. El incremento de la mediana de doce a quince se explica, porque hasta el año 2015 la nota mínima aprobatoria fue de once y a partir del año 2016 se incrementó a catorce.

Figura 2

Notas Promedio obtenidas en la UNSAAC Según Semestre Académico

Un resultado muy importante es el rendimiento académico de los estudiantes a nivel de toda la universidad. Durante el periodo comprendido entre los semestres académicos de 2016-1 y 2019-1, el 70% de los estudiantes tuvo un resultado satisfactorio y el 5% un resultado destacado, implica que el 75% de los estudiantes aprobó la asignatura en la que se matriculó. Los resultados se muestran en la figura; se observa que hay un 4% de estudiantes que no se presentaron (NP) a ninguna evaluación; estos estudiantes tuvieron una nota de cero y en la práctica abandonaron el curso.

Figura 3

Rendimiento Académico de Estudiantes de la UNSAAC.Semestres 2016-1 al
2019-1

Resulta interesante determinar los rendimientos según escuelas profesionales (figura 4). Los rendimientos académicos en la UNSAAC no son uniformes; estos varían según la escuela profesional; si a nivel global en la UNSAAC, el 75% de los estudiantes aprueba el curso en el cual se matricularon; hay un grupo de escuelas donde la proporción de estudiantes que aprueban el curso matriculado es mucho menor. Escuelas de ciencias básicas y de ingenierías son las de menores rendimientos académicos con proporciones de desaprobados (NP, insatisfactorio y en proceso) que están entre el 30 y el 39%.

Figura 4

Rendimiento Académico Según Escuela Profesional

En el extremo opuesto tenemos un grupo de escuelas profesionales con los mejores rendimientos académicos en la UNSAAC: Contabilidad, Ciencias Administrativas, Turismo, Educación, Medicina Humana y Enfermería, escuelas con proporciones de aprobados en el rango del 78% al 89%.

Figura 5

Rendimiento Académico Según Departamento Académico

Con el intento de explicar por qué las escuelas de ciencias básicas y de ingenierías tienen un bajo rendimiento académico, se elaboró un cuadro de rendimiento, de acuerdo con el departamento académico que brinda el servicio de enseñanza; en la figura 5 se observa que los departamentos con el menor rendimiento académico son los de ciencias: Química, Física y Matemáticas y Estadística; en efecto, solo entre el 56% y el 60% de los estudiantes que lleva un curso a cargo de este departamento lo aprueba.

Se puede deducir que estudiantes de las escuelas profesionales que toman varios cursos en áreas de ciencias básicas (Matemáticas, Física y Química) se verán afectados negativamente en su rendimiento académico. Esto explica, en parte, por qué las especialidades de ingeniería tienen bajo rendimiento académico.

En la presente investigación se muestra el porcentaje de alumnos aprobados y desaprobados, según cursos y escuelas profesionales, con datos de la población semestres 2016-2019 de la UNSAAC, una universidad pública. El rendimiento académico es un problema complejo, intervienen diferentes factores, así como lo menciona Noguera y Wells (2011); por lo que evaluarlo multidisciplinariamente es fundamental, para elaborar diagnósticos institucionales, que ayuden y conduzcan hacia una intervención exitosa.

Para el rendimiento académico se cuenta el factor: metodología de enseñanza. Por su parte, De la Fuente Sánchez et al. (2017) realizaron su estudio sobre el impacto de las TIC sobre la enseñanza universitaria a distancia, con un doble enfoque: cuantitativo y cualitativo, quienes concluyen que el vídeo es un material didáctico apreciado y valorado.

El bajo rendimiento académico es un problema actual, impacta sobre las instituciones, con la finalidad de esclarecer las causas que lo generan para enfrentarlo; se han realizado investigaciones que analizan factores sociales, académicos, familiares y personales, entre otros; los cuestionamientos anteriores permiten considerar que el panorama actual del rendimiento académico es preocupante; la investigación mencionada expone las interrogantes: ¿cuáles son las causas que generan esta situación?¿cuál es el tiempo de estudios en cada carrera profesional?

Chiecher et al. (2018) realizaron un estudio sobre la creatividad, el género y el rendimiento académico, en ingresantes de ingeniería, cuyos datos fueron recogidos de la administración mediante un test. Los resultados revelan la complejidad de la vinculación de las tres variables, a diferencia de que en la presente investigación se consideraron todas las carreras, en las cuales se midió solamente el rendimiento académico de los estudiantes, cuyos resultados fueron más complicados en las carreas de ciencias.

Conclusiones

El rendimiento global de los estudiantes de la UNSAAC es el siguiente: destacado en un 5%, satisfactorio en un 70%, en proceso 9 % e insatisfactorio 16%; esto significa que el 75% de los matriculados en una asignatura la aprobó.

El rendimiento académico depende de la escuela profesional. Las escuelas de ingeniería y ciencias básicas presentan un bajo rendimiento académico; en ellas, solamente del 61% al 70% de los estudiantes aprueba la asignatura en la que se matriculó. Por otro lado, escuelas: Contabilidad, Enfermería, Ciencias Administrativas, Turismo, Educación, Medicina Humana y Enfermería tienen los mejores rendimientos de la UNSAAC, con tasas de aprobación que varían del 78% al 89%.

Los cursos de Química son los más difíciles de aprobar en la UNSAAC; sólo el 56% de los estudiantes logró aprobar la asignatura de química en la se matriculó. Siguen en dificultad los cursos de Física y de Matemáticas, con tasas de aprobación de 59% y 60%, respectivamente. Estos bajos rendimientos académicos alargan los años requeridos para egresar.

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